5 ejemplos de objetivos SMART

¿Quieres conocer cómo establecer un objetivo que te ayude a alcanzar los resultados de negocio que esperas? En este artículo te presentaremos algunos ejemplos de objetivos SMART que te ayudarán a guiar de forma estratégica a tu organización.

En muchas ocasiones, los líderes de las organizaciones no tienen en cuenta en qué criterios deben fijarse para establecer objetivos inteligentes que ayuden a coordinar los esfuerzos colectivos y distribuir las actividades de forma eficiente.

Es aquí donde entran los objetivos SMART, que han venido a jugar un papel clave para brindar claridad, especificidad y viabilidad a los proyectos con base en metas claras y asequibles para organizaciones. ¡Conozcamos de qué se tratan y algunos ejemplos!

¿Qué es un objetivo SMART?

El acrónimo SMART se conforma de las palabras en inglés: specific, measurable, attainable, realistic y timely (específico, medible, alcanzable, realista y temporal). Por lo tanto, un objetivo SMART es aquel incorpora todos estos criterios para ayudar a centrar los esfuerzos de un grupo o individuo y aumentar las posibilidades de alcanzar un resultado idóneo.
Los objetivos SMART desempeñan un papel importante en el control del progreso periódico de las actividades diarias para que se cumpla el objetivo final de una organización.

Antes de continuar con los ejemplos, entendamos lo que significa cada punto de la palabra “SMART”:

Específico

Los objetivos que son específicos tienen una probabilidad significativamente mayor de ser cumplidos. Para que un objetivo sea específico, hay que tener en cuenta las preguntas:

• ¿Quién está involucrado en este objetivo?
• ¿Qué quiero conseguir?
• ¿Dónde se va a conseguir este objetivo?
• ¿Cuándo quiero conseguir este objetivo?
• ¿Por qué quiero alcanzar este objetivo?

Cuanto más información puedas aportar, mejores serán los resultados y más fácil te resultará alcanzar tus objetivos, ya que el camino para alcanzarlos será más claro. 

Si estás dirigiendo una organización o estás en una posición en la que estás tomando decisiones estratégicas, a partir de este momento verás si tienes suficientes recursos para alcanzar tus objetivos o necesitas esforzarte para hacer que las cosas sean mejores.

Medibles

Un objetivo SMART debe tener criterios para medir el progreso. Si no hay criterios, no podrás determinar tu progreso y si estás realmente en el camino de alcanzar el objetivo planteado. 

Para que un objetivo sea medible, debes tener una forma cuantitativa de medir que lo has logrado efectivamente. Para ello, es necesario incluir algunos números en la definición, por ejemplo, porcentajes o importes exactos. Algunas preguntas que puedes considerar aquí son:

• ¿Cuánto se necesita?
• ¿Cómo sé si he alcanzado mi objetivo?
• ¿Cuál es mi indicador de progreso?

Por ejemplo, no basta con decir “aumentar el número de clientes”, lo mejor es hacer un análisis de los clientes que tienes ahora, de los que necesitas conseguir, así como el número total de clientes que hay que conseguir en un determinado periodo de tiempo.

Cuantos más datos cuantitativos tengas, más medible será tu objetivo.

Alcanzables

Un objetivo SMART debe ser factible y alcanzable. Esto te ayudará a descubrir cómo puedes realizar ese objetivo y trabajar para conseguirlo. La posibilidad de alcanzar el objetivo debe ser amplia para que te sientas desafiado, pero debe estar lo suficientemente bien definida como para que puedas realmente alcanzarla. Pregúntate:

• ¿Tengo los recursos y las capacidades para lograr el objetivo? Si no es así, ¿qué me falta?
• ¿Otros lo han hecho antes con éxito?

¿Sabías que muchos objetivos no se cumplen porque parecen imposibles? Es aconsejable saber que va a haber tareas difíciles de realizar y que no tienes más remedio que llevarlas a cabo. 

Todos queremos ser los primeros en lograr algo y ese sentimiento puede ser motivador para algunas personas, sin embargo, establecer metas prácticamente imposibles puede hacer que el equipo se frustre. 

Por lo tanto, para que un objetivo sea alcanzable, se necesita un análisis previo de lo que se ha hecho y lo que se ha logrado hasta ahora. Esto te ayudará a conocer y comprender el salto que quieres dar o dar un paso atrás y analizar lo que se ha perdido.

Realista

Para definir objetivos relevantes y realistas, debes medir el alcance de su potencial y de aquellos que están relacionados con tu organización o negocio. Un aspecto muy importante a la hora de establecer objetivos relevantes es saber si se dispone de los recursos adecuados para alcanzarlos.  

Además, es importante aquí eliminar creencias negativas que nos llevan a decir, por ejemplo: “No puedo”, tal vez será más fácil crear un objetivo realista y alcanzable. Los objetivos sólo se pueden alcanzar si se tiene todo en su lugar, desde la etapa de la ideación hasta conocer los recursos que van a ayudar a lograr estos objetivos.

Recuerda que las metas inalcanzables no deben ser arrojadas por la borda. Es esencial crear nuevas estrategias y persistir para lograr estos objetivos. Esto no sólo enviará un mensaje positivo a los empleados, sino también a tus competidores que alguna vez han dudado de tu capacidad para tener éxito.   

Temporal

Tal vez este sea uno de los factores más importantes que determinan si se cumple o no un objetivo. Si no pones una hora de inicio y una hora final, lo más probable es que nunca consigas cumplir tu objetivo. 

Debes programar y poner un tiempo al objetivo. Esto te ayudará a saber si lo que estás haciendo es óptimo para alcanzar la meta a tiempo, o tal vez sería mejor si le das un poco más de velocidad.

En caso de que se te haya acabado el tiempo y no estés alcanzando los objetivos en el periodo que has definido, no te preocupes, también deberías aprender a ser flexible. Simplemente no abuses de esta flexibilidad, ya que hay una delgada línea de ruptura del compromiso.

Ejemplos de Objetivos SMART

Ahora te presentaremos algunos ejemplos de Objetivos SMART que te ayudarán a trazar estrategias y definir los objetivos y metas de tu organización:

1. Logro profesional

Conseguir 5 nuevos clientes que gasten al menos 100 mil pesos al mes durante los próximos 6 meses. Para conseguir esta cifra, reúnete con 20 nuevos clientes potenciales al mes y envía 15 nuevas propuestas al mes.

¿Es específico? Sí, porque establece claramente cuántos clientes hay que ganar y cuánto tienen que gastar.

¿Es medible? Sí, porque establece el trabajo necesario para conseguirlo: generar clientes potenciales reuniéndose con 20 nuevos prospectos al mes.

¿Es alcanzable? Sí, considerando que la empresa puede ya estar ganando dos o tres clientes al mes. Esto hace que el objetivo esté al alcance.

¿Es realista? Sí, por todas las razones anteriores, este objetivo está dentro del ámbito de lo posible.

¿Es temporal? Sí, porque se indica claramente lo que hay que hacer cada mes y el tiempo que hay que esperar para alcanzar este objetivo.

2. Desarrollo de habilidades

Dominar una canción en el piano en el plazo de un mes practicando 1 hora, 3 días a la semana.

¿Es específico? Sí, porque especifica una canción que hay que aprender, así como el tiempo de práctica necesario para conseguirlo.

¿Es medible? Sí, porque permite medir los puntos de referencia (tiempo de práctica), así como si se ha logrado o no el objetivo general al término del plazo.

¿Es alcanzable? Sí, este objetivo es alcanzable para un pianista principiante considerando el tiempo que puede invertir a la semana.

¿Es realista? Sí, al tomarse el tiempo propuesto para practicar, este objetivo es realista.

¿Es temporal? Sí, porque determina los plazos de tiempo en que se puede llevar a cabo la práctica.

3. Pérdida de peso

Perder 1 kilo y medio por semana durante las próximas 8 semanas. Hazlo caminando 30 minutos al día, cinco días a la semana, y limitando las calorías a 1.200 al día.

¿Es específico? Sí, porque contiene objetivos semanales y diarios, lo que hace que este objetivo SMART sea muy específico.

¿Es medible? Sí, hay tres números en este objetivo que son medibles.

¿Es alcanzable? Sí, porque en lugar de apuntar a un “peso objetivo” general, establece incrementos para mantener su objetivo alcanzable.

¿Es realista? Es importante pensar a largo plazo cuando se trata de una pérdida de peso duradera. Un kilo por semana es un objetivo realista.

¿Es temporal? Sí, porque establece un número de 8 semanas para alcanzar el objetivo.

4. Aumentar las ventas del negocio

Aumentar las ventas de nuestro producto X en un 20 % en los próximos 3 meses

¿Es específico? Sí, porque establece un porcentaje de aumento claro.

¿Es medible? Sí, porque puedes monitorear tu objetivo a través de un dashboard de ventas y evaluar si efectivamente se alcanzó el aumento deseado en el término establecido.

¿Es alcanzable? Sí, ya que en los equipos de ventas el aumento de porcentajes de este tipo suele ser una métrica accesible.

¿Es realista? Sí, ya que no es imposible alcanzar un aumento como este con las estrategias de ventas adecuadas.

¿Es temporal? Sí, pues fija un plazo de tiempo para evaluar los resultados alcanzados.

5. Aumentar el tráfico web

Aumentar el número de visitas a nuestro sitio web en un 80 %, de 20 mil a 100 mil visitas en los próximos 12 meses.

¿Es alcanzable? Sí, porque establece el aumento del tráfico de acuerdo con la experiencia previa.

¿Es medible? Sí, porque establece el número de visitas deseadas en un determinado tiempo, con lo que es posible evaluar si se cumplió al término del mismo.

¿Es realista? Sí, porque se encuentra dentro de los parámetros comúnmente utilizados de generación de tráfico web.

¿Es temporal? Sí, porque fija un límite de tiempo para evaluar los resultados.

Ejemplo de objetivo SMART vs. objetivo ambiguo

Tomemos un ejemplo para entender cómo los objetivos SMART y las metas inteligentes nos ayudan a ahorrar tiempo. Imagina una organización que trabaja para eliminar las bolsas de plástico y residuos similares de toda la ciudad, por lo que tiene objetivos y metas definidas como:

“Nuestro objetivo es que toda la ciudad esté limpia y libre de residuos plásticos”.

Este objetivo es un poco vago. Sin embargo, si el objetivo se rescriben siguiendo los parámetros SMART, podría quedar de esta manera:

“Como organización, nuestro objetivo es limpiar la ciudad y liberarla de cualquier residuo plástico en los próximos dos años a través de actividades diarias de manejo y recolección con el apoyo de nuestros voluntarios”.

La segunda vez que se reescribió la meta y el objetivo, tiene una cierta línea de tiempo, se menciona la actividad específica, tienen claro quiénes estarán ayudando a la organización y lo que quieren lograr es bastante seguro.

De esta manera, las personas que están asociadas a la organización saben cuáles son sus tareas y cuál es el cronograma en el que deben cumplirlas. Entre las ventajas de contar con objetivos SMART, la organización podrá evitar cualquier confusión y las actividades se podrán desarrollar de forma clara y sin problemas.

¡Crea tus objetivos SMART!

Ahora que ya tienes algunos ejemplos de objetivos SMART será más fácil que puedas establecer la brújula que guíe los proyectos de tu organización, teniendo en cuenta la meta final que se debe alcanzar con cada una de las actividades que se realicen.

Ten en cuenta que, cuando la meta u objetivo final se conoce con suficiente antelación, es más fácil que se trabaje de forma eficiente y con una conciencia más clara sobre la finalidad de cada proceso. Esto también reduce el desperdicio de recursos y ayuda a gestionar el trabajo de forma más inteligente.